Como sabrás, en Grupo Corsa uno de nuestros objetivos es el de ofrecer soluciones de tratamiento de aguas más sostenibles, además de acercarte, a través de este blog, algunos consejos para llevar un estilo de vida más respetuoso con el medio ambiente.
Hoy la protagonista es la alimentación y, más concretamente, cuáles son los cambios que podemos hacer en nuestra dieta y en nuestro día a día para cuidar de nuestro planeta. ¡Toma nota!
- Reduce el consumo de carne y lácteos: se trata sin duda del paso esencial, y es que aumentando el consumo de otros alimentos como las verduras, la fruta o las legumbres contribuimos a reducir la huella de carbono que dejan industrias como la cárnica o la de los lácteos. Ten en cuenta que el 26% de las emisiones mundiales proviene de la producción de alimentos, y ahí la carne juega un papel muy importante. Los datos hablan por sí solos: producir 100 gramos de proteína animal genera 30 veces más huella de carbono que la producción e 100 gramos de proteína vegetal.
- Opta por alimentos certificados: en ganadería, es importante que se trate de alimentos libres de antibióticos y hormonas de crecimiento, mientras que en el caso del pescado, el sello MSC garantiza que se trata de pesca sostenible.
- Escoge siempre alimentos de proximidad y de temporada: de esta forma contribuirás a reducir la huella de carbono del transporte.
- Otro de los grandes problemas es el despilfarro de los alimentos, y es que uno de cada tres de ellos termina en la basura en Europa. Terrible, ¿verdad? Para evitarlo, planifica muy bien tus menús y compra solo lo necesario.
- Utiliza bolsas reutilizables para hacer la compra, huye del plástico y, si puedes, realiza tu compra en tiendas a granel, De esta forma contribuirás a reducir la cantidad de residuos generados a través de la alimentación.
- Evita el consumo de ciertos alimentos: ¿conoces los problemas de la producción de anacardos? ¿O lo que está ocurriendo con la alta demanda mundial de alimentos como la chía o el aguacate? Ante la duda, los productos locales siempre serán la garantía de que no estamos contribuyendo a problemas como la deforestación por culpa de nuestros hábitos alimenticios.
¡Tomar conciencia es el primer paso para el cambio!