A parte del H2O puramente dicha, el agua potable que llega a nuestras casas puede contener muchas sustancias que ni te imaginabas. Desde arsénico, a cianuro, pasando por hongos o bacterias.
Te explicamos qué sorpresitas te puedes encontrar y qué dice la normativa al respecto.
Primero de todo: ¿Qué dice la legislación?
La calidad de las aguas de consumo está regulada por los siguientes reglamentos:
- En España se articula a través del RD 140/2003.
- En la Unión Europea por la Directiva 98/83/CE
- Y la OMS (Organización Mundial de la Salud) también marca sus propios baremos.
Estas son las cantidades máximas de las principales sustancias que se podrían encontrar en el agua, según las 3 normativas (española, europea y OMS). Es decir, más de estas cantidades se considera tóxico.
Primer apunte: ¿No te parecen curiosas las discrepancias entre organismos?
Como ves, sería perfectamente legal encontrarte sustancias que ni te imaginabas en el agua con el que te haces el café cada mañana. Solo que se considera que está en unos niveles de toxicidad aceptables para ti.
¿Se cumple la legislación en cuanto a calidad de agua de consumo?
Según los datos del último informe del Ministerio de Sanidad, casi el 100% de las muestras analizadas cumplen la normativa.
Sí, casi. Porque en el año 2019 (último informe) 67.000 muestras no pasaron los controles de calidad.
Algunos contaminantes sobrepasaron en 10 veces los baremos. Ups.
Concretamente estos: Escherichia coli, Enterococo, Clostridium perfringens, Cobre, Fluoruro, Níquel, Plaguicidas, Plomo, Tri + Tetracloroeteno, Baterias coliformes (contaminación fecal), Aluminio, Amonio, Carbono orgánico, Cloro, Cloruro, Hierro, Manganeso, Sodio, Sulfato y Turbidez.
Solo esperamos que no te encontraras en ninguna de las 4.825 zonas de abastecimiento que no cumplieron con la normativa en algún momento.
Lo que la legislación no tiene en cuenta
Contar con una legislación que controle la calidad del agua que bebemos es imprescindible pero no es infalible por 3 motivos:
- Errores humanos: como acabamos de explicar, pueden haber pequeñas infracciones o incidencias que repercuten directamente en la salud del consumidor.
- Malas instalaciones privadas: la legislación no controla la calidad de las instalaciones por la que transita el agua antes de salir por el grifo. Ya sea por una mala elección o conservación de los materiales de las tuberías, por unas malas prácticas de instalación y mantenimiento, o por la edad del edificio, el agua puede contaminarse en este punto.
- Efecto acumulativo: la normativa tampoco contempla que podamos estar ingiriendo los mismos tóxicos de otra forma (alimentación, inhalación…).
Una posible solución: Sistemas de filtración en casa
Por este motivo, la gente tiende a consumir agua embotellada o a utilizar sistemas de filtración del agua corriente.
En este artículo no vamos a comentar las razones por las que consumir agua embotellada es un pequeño atentado contra el medioambiente. Nos vamos a centrar en los sistemas de filtración.
Existen infinidad de opciones actualmente en el mercado. El problema es que la mayoría de ellas únicamente filtran un porcentaje de cloro, cal, microplásticos, algunos metales pesados y poco más.
La solución infalible: Osmotic de Corsa
Osmotic es la osmosis inversa más potente del mercado y que, además, no rechaza ni una gota de agua.
A menudo nos comparan este producto con otros “similares pero más económicos”, pero es que todo intento de comparación es algo ridículo, ya que no existe ni un solo aspecto de este equipo que no sea verdaderamente excepcional.
Hoy vamos a centrarnos en un solo aspecto: las sustancias que elimina.
A continuación te mostramos una tabla de sustancias que filtra y el porcentaje de retención.
Te explicamos como interpretarla, porque a veces puede ser complejo.
Primer ejemplo: Sea cual sea la cantidad de bacterias que salgan por el grifo de tu casa, Osmotic consigue retener el 100% de ellas. Resultado, beberás agua libre de bacterias.
Otro ejemplo ficticio: Si por el grifo de tu casa saliera agua con 1 gramo de arsénico (cifra totalmente improbable), Osmotic conseguiría retener entre el 94 y el 96% del mismo. Resultado, beberías 0,06 gramos, es decir, retendría entre 0,94 y 0,96 gramos.
Y así con todas las sustancias que aparecen en la tabla, y con muchas más que no aparecen.
Una de las razones por las que Osmotic tiene un poder de retención tan impresionante es por la calidad de su membrana. Los agujeritos de la membrana son taaaaan absolutamente pequeños, que no dejan pasar prácticamente ninguna de estas sustancias.
Si quieres saber más sobre Osmotic, sigue este enlace.
